Cualquiera con suficiente conocimiento del negocio lo sabe: Shawn Michaels es el mejor luchador que jamás haya pisado un ring, y no es sólo porque lo diga gente como Vince Kennedy McMahon, Steve Austin, Kevin Nash o Chris Jericho entre otros.
El número de cinturones absolutos vestidos a lo largo de una carrera no nos dicen gran cosa por lo general, aparte de darnos la impresión de que el galardonado fue un tipo muy importante para su copañía; pero eso es pura ficción, todos los adultos lo sabemos, la grandeza la deciden los combates cinco estrellas conseguidos _apenas existen_, la entrega en el ring, el talento con el micrófono, la técnica de sus movimientos, el carisma entre los fans, la capacidad para vender, su gimmick, el impacto y huella que deja ... los cinturones son pura "política" en la mitad de ocasiones. Roddy Piper, Mister Perfect y Ricky Stemboat son leyendas gigantescas que nunca vistieron el oro absoluto y no tienen mucho que enviadar a gente mediocre, como The Miz, Sheamus o Dolph Zigler, que sí lo han hecho. Hoy día se regalan títulos _eso no solía pasar en los 70, 80 y 90_ y los viste gente que será olvidada muy pronto u ocupará un lugar menor en este espectáculo.
HBK destaca en todos los aspectos importantes: Primero, su calidad "luchística", que nos ha dejado diferentes obras de arte a lo largo de los años, como el Ladder Match contra Razor Ramon en Wrestlemania X, el Hell In A Cell contra Undertaker en Bad Blood 97, la Street Fight con Triple H en SummerSlam 2002 o el Carreer Threating Match contra Ric Flair en Wrestlemania XXIV. Esos son sólo unos pocos ejemplos de lo que Shawn es capaz de sacarse de la chistera, pero en su carrera, Shawn ha conseguido 11 veces el mejor combate del año, record que se antoja inalcanzable para nadie y que a buen seguro seguirá imbatido para siempre. Michaels posee también un gran carisma, con el que ha logrado que todo un estadio se le eche encima para abuchearle u ovacionarle hasta quedarse sin voz. El uso del micrófono es otra de las virtudes del Showstopper, que sabe darle una intensidad, humor y/o dramatismo a las promos que muy pocos pueden conseguir y, en parte, es gracias a ello por lo que lleva tan bien los feudos, como en su rivalidad con Jericho, donde se alcanzó un nivel de odio increíble, o con Triple H, con quien la separación de DX se vivió como una tragedia para el wrestling y su rivalidad como un drama. Otro aspecto en el que destacó Michaels fue en la regularidad: es muy, muy difícil ver a Shawn fallar un movimiento de su amplísimo repertorio, y lleva el peso de sus combates con una solidez aún inigualable; probablemente sea uno de los mejores luchadores que hayan existido a la hora de plantear un combate y de sacar lo mejor de sus rivales, ya sea de un Batista en baja forma, un paupérrimo JBL o un irregular Hulk Hogan.
Por otro lado, The Heartbreak Kid ha rendido siempre bien en todo tipo de combates, ya sea para hacer un wrestling técnico, semi-extremo o cualquier Gimmick Match, dándole intensidad a un combate de tan sólo 5 minutos o llevando a la perfección los tiempos del ring en una pelea de media hora y más. En otros aspectos, como saber vender sus golpes o los del rival, trabajar la psicología en el ring o el transmitir sensaciones al público, Michaels no ha tenido rival jamás. Otro recordatorio interesante es que se puede decir que HBK ha ejercido _y aún lo hace_ muy a menudo de salvador de la WWE, pues es a quien se recurre cuando las cosas no marchan bien, tanto para rescatar un show entero junto a Triple H reuniendo a DX en 2006, 2008 y 2010, volver antes de tiempo y luchar semi-lesionado, como en 1998 (con resultados fatales para HBK y el wrestling en general) y 2007 ... o para emparejarse en luchas con wrestlers en un estado malísimo, como JBL o Kozlov y que salgan buenos combates. Shawn Michaels, en más de 20 años en la WWE, siempre, desde que en 1988 llegara como uno de los Rockers, hasta su adios en Wrestlemania XXVI, siempre, ha sido uno de los luchadores punteros de la empresa; y ese tipo de carreras, de más de dos décadas en lo más alto, no pueden decirlo más que Hulk Hogan, Ric Flair, Sting y Undertaker.
Y a pesar de todo... ¡solo tiene 4 títulos mundiales! Para un novato o un fanboy, seguro que es signo de que Shawn hizo algo mal o de que exageramos _y erramos_ en nuestro juicio. Para un veterano, HBK es un hombre que lo ha conseguido todo en el mundo del wrestling. Además de sus 4 campeonatos absolutos, Michaels ha vencido 2 veces en el Royal Rumble Match (y de forma consecutiva), siendo el primero en ganar saliendo el número 1. Ha logrado 3 veces el Campeonato Intercontinental, en 1 ocasión el European Championship y en 6 más, el Tag Team Championship (y 1 más logrado pero no reconocido, y que le hubiera supuesto ser 7 veces campeón) y ha entrado en el Salón de la Fama de la WWE en menos tiempo que nadie. Shawn también ha sido Triple Crown, Grand Slam Champion y ha conseguido 11 premios Slammy.
Alejándonos de los logros materiales, HBK ha formado parte de un Tag Team fundamental en el wrestling moderno, como lo fueron The Rockers; fue la pieza imprescindible dentro del stable más influyente de la historia: D-Generation X; y, aunque de manera casi simbólica, ha estado dentro de la nWo. Además, la prestigiosa PWI, le atribuye el mejor combate del año en 1993, 1994, 1995, 1996, 2004, 2005, 2006, 2007, 2008, 2009 y 2010 (marca inancalzable), lo señala como el wrestler más popoular en 1995 y 1996, destaca su feudo con Chris Jericho como el mejor de 2008, lo califica como el hombre del año en 1996 y en 2010 fue el luchador más inspirador del año. La popular WON le ha dado dos combates de 5 estrellas _la pelea perfecta_, dos feudos del año, cinco combates del año, luchador más carismático de los años 1995 y 1996, mejor equipo de 1989 con Marty Janetty, mejor babyface de 1996, luchador favorito del público en 1998 ... Su carrera, casi año por año, se mide en premios, bien en forma de cinturones (los menos), bien en forma de reconocimientos de la prensa especializada y el público.
También hay que añadir como datos "anecdóticos", que Michaels ha participado en la primera edición de combates tan ilustres como los Ladder Match, Elimination Chamber, Ironman, Hell In a Cell o Casket Match (¿innovador es la palabra que buscáis?) y que a lo largo de su carrera el Chico Rompecorazones se ha ganado apodos tan significativos como The Heartbreak Kid, The Showtopper, HBK, The Sexy Boy, Mr. Wrestlemania, The Headliner, The Icon, The Main Event, The Future Hall of Famer (este ya en 2002/2003)... y creo que esto es todo... por el momento.
P.D: Fuera de lo puramente luchístico, mantengo que Hulk Hogan es el más grande de todos, ya que sin él, el wrestling en los EE.UU no sería lo que es (estaba en franca crisis) y hoy no estaríamos hablando quizás de HBK. Por otro lado, sin Hogan nunca se habría internacionalizado tanto la lucha libre ni habría tanta mercadotecnia en torno a ella. Es justo reconocerlo, porque es la realidad.
LA PARTE 2 CONTINUARÁ DEBIDO AL EXCESO DE FOTOS, QUE SEGURO QUE PERJUDICARÁ LA VELOCIDAD DE VUESTRO PC; GRACIAS
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